El uso del metanol en la industria marina ha despertado el interés en los últimos años y muchas empresas están invirtiendo en barcos propulsados con metanol. Cuando se utiliza metanol para combustible, debe cumplir con el código IGF, las directrices provisionales IMO – MSC.1/Circ. 1621 para la seguridad de los buques que utilizan metilo/alcohol etílico como combustible, y normas y reglamentos para la clasificación de buques que utilizan gases y otros combustibles de bajo punto de inflamación. El metanol es tóxico y altamente inflamable y debe manipularse con cuidado.
Las soluciones basadas en radar son la tecnología ideal. Es fiable y se utiliza habitualmente en grandes tanques de combustible marino. Otro punto fuerte es que solo se necesita un dispositivo de nivel, ya que la electrónica se puede reemplazar sin comprometer la integridad del tanque. En comparación con las tecnologías que requieren la entrada de tanques en caso de mal funcionamiento se necesitan más dispositivos.
El reacondicionamiento de maquinaria incorporado para facilitar el metanol es cada vez más común.