En los contenedores y las plantas de mezcla de carbón, el carbón pasa por un proceso de molienda moderado antes de ser almacenado. Los depósitos de carbón pueden contener miles de toneladas de material. Su tamaño y las condiciones polvorientas hacen que sea difícil medir con precisión la cantidad de carbón en el depósito o planta de mezcla. También hay riesgos de seguridad para el personal que entra en las áreas de almacenamiento para “medir a ojo” los niveles.