La pandemia de coronavirus está demostrando ser un enorme desafío global que todos debemos derrotar trabajando juntos. Para muchos de nosotros, significa quedarnos en casa y tratar de estudiar o trabajar lo mejor que podemos mientras mantenemos la distancia social y renunciamos a muchas de las actividades que normalmente haríamos con otras personas. Aunque esto pueda parecer una gran intrusión en nuestras vidas cotidianas, globalmente debemos hacerlo para hacer más lenta la diseminación de la enfermedad.
También es un momento donde nuestros trabajadores esenciales y críticos son más importantes que nunca para ofrecer los servicios que esperamos cada día, y necesitamos hacer todo lo posible por apoyarlos. Los médicos, el personal de enfermería y otros profesionales de la salud de primera línea que se enfrentan a potenciales casos, al tiempo que arriesgan su propia salud, merecen toda la admiración que podamos demostrarles. Y es alentador ver el apoyo abrumador que reciben de la sociedad y los líderes mundiales. Nuestros laboratorios están completamente sobrepasados intentando procesar resultados de pruebas lo más rápido posible para que nuestras familias puedan obtener esa información importante. Mi corazón está con ellos. Y nuestros almacenes, gasolineras y empresas de logística intentan mantenernos abastecidos de los insumos cotidianos que necesitamos para vivir, y pese a estar en un pico de demanda, están haciendo un trabajo increíble.
Pero hay otra categoría de trabajo que debe resaltarse: las personas que permiten que tengamos energía eléctrica sin interrupciones, las compañías que suministran nuestras fuentes de energía y permiten que los encargados de la limpieza sanitaria sigan viniendo a nuestros vecindarios, los profesionales de gestión de residuos y agua que continúan con su trabajo diario, nuestras empresas farmacéuticas, las empresas de dispositivos médicos y equipos de protección personal, que siguen desarrollando, fabricando y entregando insumos médicos. Tenemos trabajadores que permiten que los hospitales sigan funcionando y mantienen refrigerados los quirófanos y los medicamentos para que puedan usarse de forma efectiva. Y un grupo integral de proveedores de la cadena de suministro y profesionales de oficios que ofrecen productos y servicios muchos niveles hacia abajo para que toda esta infraestructura crítica siga funcionando. Todas estas personas deben salir de sus hogares para ir a estas instalaciones y permitir que sigan funcionando las 24 horas, gracias a las cadenas de suministro globales que se han diseñado para funcionar de manera conectada y sincronizada, mientras hacen lo mejor posible para mantener la distancia social y no ser víctimas de un virus espantoso.
En este momento, cuando muchísimas personas en todo el mundo están transitando varias semanas de permanencia en sus hogares por orden de sus gobiernos, debemos ser diligentes y aislarnos de la forma más efectiva posible. Pero seguimos necesitando que los trabajadores de servicios esenciales e infraestructura crítica hagan su parte, y necesitamos el apoyo continuo de los líderes del sector público y privado. Su misión es desempeñar estas tareas y permitirnos sobrellevar este momento complejo. Los líderes gubernamentales de todo el mundo están en tierra incógnita, y hacen lo mejor que pueden para ayudarnos a superar estos desafíos.
Apelo a los encargados de tomar decisiones en todo el mundo, sea a nivel nacional, estatal, provincial o local, en un contexto donde deben emitir las órdenes de cuarentena correspondientes, para que reconozcan a todas las personas que trabajan detrás de escena e incorporen este trabajo en sus planes. Más allá de los valientes trabajadores de la salud, cuya tarea es crítica, también necesitamos que las fábricas sigan funcionando. Es esencial que estos bienes sigan fluyendo para garantizar el mantenimiento de la infraestructura crítica y que los miles de millones de personas que necesitan estos servicios puedan seguir accediendo a ellos. Esto incluye permitir que los técnicos de servicio en todo el mundo estén disponibles para que nuestros sistemas funcionen las 24 horas, todos los días.
Les solicito que adopten órdenes que consideren el manejo de estas importantes fábricas y permitan el movimiento de los bienes y las personas involucrados en este proceso. El Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos ha publicado las Pautas para el personal de infraestructura esencial/crítica, que están demostrando ser muy útiles para captar toda la dinámica que necesitamos en estos momentos. Además, las pautas de la Asociación Nacional de Fabricantes y de otras organizaciones gubernamentales e industriales de todo el mundo están ayudando a que las empresas realicen un seguimiento del impacto estatal y local sobre las operaciones de fábricas y plantas mientras la situación evoluciona.
El tiempo es esencial. Claramente, esta es la semana en que el mundo se sincronizará con el objetivo de romper el ciclo del virus durante las semanas por venir. Podemos lograrlo. Podemos derrotar a este enemigo. De nuevo, agradezco a todos los trabajadores de primera línea y a nuestras empresas y trabajadores de infraestructuras críticas por liderar la batalla.