El pique de traspaso en minería es un gran contenedor excavado en la roca con una rejilla de acero (criba) en la base que regula la alimentación del mineral hacia los vagones para su transporte a la superficie. Las paredes son irregulares y la distancia total hasta la rejilla de alimentación puede ser de unos 225 ft (68 m). Los desafíos de aplicación incluyen la importancia de conocer la medición del nivel a medida que el mineral cae hacia el área cercana a la rejilla. El nivel no debe descender por debajo de un mínimo establecido por encima de la rejilla para que actúe como amortiguador de la caída de rocas y evite daños a la estructura. Además, el mineral puede ser de diferentes calidades y tamaños, y puede ser muy polvoriento, lo que dificulta la medición del nivel.