A medida que el material de potasa avanza en el proceso de limpieza y trituración, se recoge en contenedores de producción en diversos puntos. En el proceso de dimensionamiento, el material que es demasiado grande o muy reducido se recircula para un procesamiento adicional. El material de gran tamaño puede volver a molerse, mientras que el material más pequeño se puede enviar a la zona de compactación para que se vuelva potasa granular. El polvo muy fino se envía a la zona de cristalización para convertirlo en un líquido o un fertilizante en polvo más fino. En los contenedores de producción y dimensionamiento, el nivel puede cambiar rápidamente a medida que los silos se vacían y rellenan, lo que hace que una medición de nivel de respuesta ágil sea fundamental para determinar los suministros adecuados para la producción. Además, el material es muy polvoriento, lo cual dificulta las mediciones.