La lechada de talco concentrado se espesa en tanques de asentamiento, se seca bajo presión y se almacena antes de ser procesada en polvo. La lechada concentrada, un producto intermedio, se almacena en silos donde tiende a adherirse a las paredes del silo, a menudo creando acumulaciones que son difíciles de medir. La detección temprana de la acumulación facilita la programación oportuna de los ciclos de mantenimiento y limpieza, evitando interrupciones inesperadas del proceso. La medición precisa del contenido del silo ayuda a los operadores a gestionar y controlar el inventario y garantizar una producción continua. La instalación de interruptores de nivel fiables ayuda a controlar los ciclos de vaciado y llenado.