El carbón se recoge en pilas grandes a medida que se extrae y es triturado de la mina. Una cinta transportadora posicionable (apiladora) mueve el carbón entrante a una zona abierta. A medida que el área se llena, la apiladora se mueve a un área nueva. El carbón se mueve con rapidez y levanta polvo cuando se vierte en las pilas, lo que dificulta una medición confiable. Las operaciones necesitan saber cuándo la pila alcanza una distancia predeterminada de la apiladora para que pueda moverse. Con la medición de nivel por radar, se puede lograr una supervisión de alta precisión para garantizar un funcionamiento continuo, eficiencia de los procesos y control de inventario.